Nuestra Cataluña

El independentismo genera fobia hacia lo que no representa sus propios intereses, y yo no quiero que mis amigos, que son buena gente, se lleguen a ver invadidos por la fobia, no es bueno para ellos ni para nosotros. Se ha hablado mucho de Cataluña, y de la pretendida consulta que no está amparada en la legalidad española, pero no he oído nada que tenga que ver con proyectos comunes que nos permitan salir de la crisis, que den trabajo a los jóvenes, sean catalanes o de Murcia, que sean capaces de acercar la justicia social a los españoles víctimas del mangoneo, la presión fiscal y otros atropellos más o menos oficiales, pero en ningún caso justos. Ignoro si, al margen de las manifestaciones celebradas en Cataluña para pedir el voto, las hay también para no pedirlo, y si tienen los mismos derechos que los primeros. Pero lo que más me llama la atención es saber el por qué de la consulta; qué necesidades tienen los catalanes que no tengan el resto de los españoles, qué injurias se han cometido contra ellos que no tengan parangón con el resto de los españoles; qué ofensas hemos hecho los españoles para que muchos catalanes no quieran seguir recorriendo el camino con nosotros.

He oído, últimamente, a algunos personajes populares decantarse a favor de la consulta. Por ejemplo, a PepGuardiola. ¿qué le ha faltado a Guardiola en España?, ha ganado menos dinero; se le han reconocido menos sus méritos como jugador o entrenador?, Pau y Marc Gasol, o Xavi Hernández, a los que las respectivas aficiones estamos agradecidos por su colaboración y comportamiento en estos últimos años, también se han decantado por la consulta, una consulta que según nuestra legislación no es legal, y ellos deberían saberlo. Sin embargo, han disfrutado de las mieles del triunfo, debidamente reconocidas por los españoles que les agradecen el esfuerzo y haber dado lo mejor de ellos mismos. ¿Su actitud no es síntoma de desagradecidos?

Tal vez sea inevitable que, más tarde o más temprano, Cataluña se desgaje de España para ir a donde ni ellos mismos saben. Sería conveniente, por su propio bien, que antes de embarcarse en esa aventura limpiaran de chorizos a la casta política catalana, que parecen los intocables, que cobran comisiones ilegales y dificultan el crecimiento de la región y extorsionan a los empresarios, catalanes y no catalanes, que quieren emprender una siempre incierta aventura profesional.

Confieso que mi admiración por los catalanes, en general, heredada de la opinión que mi propia familia y de sus contactos con gentes de aquellas tierras por motivos profesionales, no ha decaído a pesar de esta campaña absurda. Sin embargo, rechazo implacablementela utilización de la hermosa lengua catalana como referencia de separación o como símbolo de superioridad. ¿de quien y por qué?.

La Cataluña que algunos pretenden enfrentar a España es la Cataluña pionera del trabajo, la buena administración y comportamiento noble... nada que ver con la pandilla de descerebrados polítiquillos pioneros del enfrentamiento, las comisiones ilegales, el enriquecimiento fácil o pelotazo y la desfachatez altiva que es la que identifica al independentismo.

Que que nadie se olvide que la primera la hicieron los catalanes, pero también los españoles. Es de todos, por eso no debe irse, por eso no debe haber consulta.